Trocanteritis

Hoy vamos a hablar de una patología bastante frecuente y que tiene como protagonista a la articulación de la cadera: se trata de la trocanteritis.

La trocanteritis es la inflamación de la zona en la que se insertan los músculos en el fémur. Aunque es una causa muy común de dolor de cadera, muchas veces el diagnóstico pasa inadvertido, ya que se confunde con otras patologías derivadas de la pelvis.

Es más habitual que esta dolencia se de en mujeres que en hombres, y normalmente afecta solo a uno de los dos lados de la cadera, aunque en algunas ocasiones se puede desarrollar de forma bilateral.  Para poder entender mejor las causas que provocan el origen de la patología, vamos a explicar brevemente la anatomía de la cadera:

La articulación de la cadera se forma gracias a la unión entre las superficies articulares del fémur y la pelvis, de tal forma que la cabeza femoral se coloca sobre el acetábulo pélvico y, a su vez, el fémur cuenta con un resalte óseo llamado trocánter en el cual se insertan la mayoría de los músculos de la zona.

Alrededor de la articulación hay varias bolsas o bursas rellenas de líquido sinovial que actúan como almohadillas, y evitan el roce entre las inserciones de los tendones y las prominencias óseas. Si se produce una inflamación de la bursa que se encuentra alrededor del trocánter mayor, habrá un aumento de la presión en la zona de la cadera y aparecerá el dolor y la sintomatología de la trocanteritis.

Trocanteritis

¿Cuáles pueden ser las causas de la trocanteritis?

  • La mayoría de las veces, la aparición de la sintomatología tiene como consecuencia un excesivo rozamiento de la zona provocado por un movimiento repetitivo, como por ejemplo:
    • Realización de deportes como correr, montar en bicicleta, halterofilia…
    • Exceso de deporte de impacto sin el desarrollo de una buena potenciación muscular
    • Malos hábitos posturales, como estar todo el rato acostados sobre el mismo lado.
  • Impacto directo sobre la cadera por un golpe en la región lateral de la articulación.
  • Debilidad de los músculos separadores de la cadera.
  • Tendencia al pie plano: una pronación excesiva del pie.
  • Alteración de la marcha debido a artrosis en la rodilla, la diferencia de longitud entre las piernas…
  • Cirugía de cadera o implante protésico.
  • Espolones óseos en la cadera.
  • Problemas en la columna vertebral que causen descompensaciones, como por ejemplo escoliosis.

¿Te has preguntado por qué hay más casos de trocanteritis en mujeres que en hombres?

La respuesta es que se debe a la morfología de la pelvis femenina: debido a su forma hay una mayor distancia entre los dos fémures, por lo que se produce mucho más roce en la zona.

Anatomía de la cadera
Pelvis famenina y masculina

SINTOMATOLOGÍA:

Los síntomas más comunes son:

  • Dolor en la articulación de la cadera. Podemos notar las molestias de forma localizada o incluso fuera del muslo.
  • Rigidez articular con sensación de chasquido.
  • Inflamación de la articulación de la cadera.
  • Dificultad para deambular.
  • Dolor agudo al principio y con irradiación posterior.

TRATAMIENTO:

  1. Lo primero que debemos que hacer es interrumpir la actividad que nos provoca el dolor.
  2. A su vez, la aplicación de hielo sobre la zona suele aliviar bastante la sintomatología.
  3. Si el dolor fuese muy intenso y fuese necesaria la administración de medicación, debemos acudir  a un médico para que nos proporcione las pautas adecuadas, nunca automedicarnos.

FISIOTERAPIA PARA TROCANTERITIS:

Con la fisioterapia conseguiremos: por un lado, reducir la inflamación y el dolor en el paciente con técnicas de relajación de la musculatura, estiramientos, movilizaciones articulares… y por otro, potenciar la musculatura de la cadera y de la pierna que se encuentra debilitada mediante ejercicios.

El tratamiento común de la trocanteritis y el síndrome de dolor del trocánter mayor debe ir encaminado, bajo nuestro punto de vista, basado en las últimas evidencias a nuestro alcance, en el adecuado manejo de la afectación del tendón del glúteo menor y medio y la corrección de la movilidad pélvica, basando la parte principal del tratamiento en la adecuada solicitación de cargas a la musculatura afectada y el correcto manejo de la facilitación de la movilidad pélvica que en muchos casos se ve afectada.

Un ejemplo de abordaje de la trocanteritis sería combinar la terapia manual con el fin de facilitar la movilidad pélvica adecuada con ejercicios con la carga adecuada para mejorar el estado del tendón del glúteo y un enfoque importante en corregir el patrón de la marcha que facilita la perpetuación del problema.

Esperamos que hayas aprendido un poquito más acerca de esta patología, y que en caso de sufrirla, sigas nuestros consejos y  acudas a nuestra Clínica de Fisioterapia Carmen Alonso, para conseguir resolver tu problema de la forma más eficiente posible.

Para recibir asesoramiento personalizado puedes contactar con nosotros a través de nuestro teléfono 646 526 320

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